Las verdades más estables, se someten a grandes pruebas.

Cada planeta representa un proceso de la psiquis, una manifestación de todos los aspectos que como humanos nos integran. Mercurio, es el representante de las comunicaciones, la expresión no verbal, hablada y escrita. Es ágil y conforma un momento en el que nos abrimos a los procesos de aprendizaje. Observa el mundo exterior, lo capta y posteriormente lo traduce en palabras, escritos, expresiones que pueden llegar a ser grandes creaciones artísticas.

Esta semana ingresa el planeta de la estructura mental (mercurio) al signo de la oscuridad, (Escorpio). Ambas energías se funden, como amantes enamorados con la intencionalidad de integran sus talentos individuales y penetrar nuestra psiquis. Entramos a los niveles más intensos de nuestras estructuras mentales, conectamos con lo trascendental, pues la energía Escorpio jamás se dejan impresionar o engañar por las apariencias. Esta fusión, llegarán directamente a lo esencial de cada situación, persona, o lo que esté en análisis.

Mezclar la rapidez de mercurio con la profundidad plutoniana, genera un poder capaz de llegar de forma expedita al núcleo de la emoción/pensamientos, y racionalizarla con planteamientos tan sólidos como densos. Lo que les otorga un gran talento como terapeutas, detectives, investigadores, pues no dejarán de buscar hasta llegar al origen de la situación. Replantear las verdades mas establecidas en nuestra psique y la desequilibra.

La invitación a la acción, es la energía disponible.

Esta mixtura abre la oportunidad para que deseches pensamientos duales, que te generen sufrimientos y escases en tu vida. Es un momento oportuno para que sueltes culpas, creencias limitantes, rencores y resentimientos. Sacar toda la pobreza mental, acércate a lo que te genere paz. Obsérvate inocente y perfecta, tal como eres.